martes, 29 de junio de 2010

Para seguir pensando la cárcel y la seguridad

Podrán decirme ingenuo, podrán decirme romántico: para mí, periodista y amanuense son oficios distintos, y lamentablemente, muchos periodistas tienen etapas de su vida en que cambian a escribas del poder. Debo decir que no siempre esto responde a que "se vendió", y muchas veces les pasará a personas con la mejor de las intenciones, y la más firme de las convicciones.
El caso es que yo disfruto de leer buenos periodistas no por lo que piensan, sino porque me hacen pensar desde la crítica al poder, la mirada alternativa a lo establecido. En cambio, los amanuenses (insisto, aún los que tienen buenas razones y buenas intenciones) la verdad que no me hacen bien. Siento que me están bajando línea, que están procurando que no piense sino que asienta y acompañe. Por sobre todas las cosas, me da mucha bronca y mucho hastío que gente con probada capacidad de pensamiento crítico, e innegable talento para comunicar los valores de las libertades cívicas, se ponga a justificar abusos de poder (aunque se proclamen en nombre de la revolución o lo que sea), y que personas que han sabido ser paladines del control y la transparencia se ponga a cantar loas a los poderosos que gambetean el control republicano.
Por eso hace unos cuantos años dejé de leer a Horacio Verbitsky. Hoy, por un copete seductor, me reencontré con el periodista que desde el apogeo K ha sido devorado por el amanuense. No sé cuánto le va a durar, pero que su compromiso con la causa de los presos (que junto a una serie de afortunadas circunstancias llevó a que un fallo señero terminara bautizado con su nombre) haya permitido que por un rato el amanuense dejara salir al periodista, no deja de ser una buena noticia.
Claro, podrán decirme que en realidad el "Perro" está haciendo otra operación, que alguien del entorno K le vuelve a cascotear el techo del rancho a Scioli, que la mar en coche. Aunque por ahí tengan razón, no me importa nada. Déjenme disfrutar de un buen trabajo periodístico, y si quieren, disfrútenlo acá. El tema (otra vez, la cárcel y las contradicciones del discurso manodurista "pour la galerie") vale la pena.

lunes, 21 de junio de 2010

Relatoría de la CIDH constata graves condiciones de detención en la provincia de Buenos Aires


Vale la pena leer el comunicado de prensa de la Relatoría de la CIDH, fechado hoy 21/6/10, en el que se informa sobre las conclusiones preliminares de la visita reciente (7 al 10/6/2010) a cárceles y comisarías de la provincia de Buenos Aires.
En ese comunicado la relatoría comienza por expresar "profunda preocupación" por las condiciones de detención en la que se encuentran las personas privadas de libertad en la provincia de Buenos Aires. Recuerda que "además de respetar su vida e integridad personal, el Estado tiene la obligación de asegurar condiciones mínimas de detención que sean compatibles con la dignidad humana".
La Relatoría "considera preocupante el uso abusivo de la detención preventiva, en detrimento de los principios de presunción de inocencia, necesidad y proporcionalidad que deben regir este mecanismo procesal" y "observa que los jueces optan por la medida cautelar más gravosa para la vigencia del derecho a la libertad durante el proceso, con el objeto de mostrar eficiencia y evitar los reclamos de la sociedad, los medios de comunicación y del mismo poder político".
Sobre las últimas reformas al CPP de la provincia de Buenos Aires, y en consonancia con las voces alzadas desde las ONG del sector (por ejemplo INECIP y CELS), la Relatoría "observa con preocupación las últimas reformas procesales por las que se restringió el acceso a las medidas alternativas a la privación de libertad y se aplican criterios sustantivos para el análisis de procedencia de la prisión preventiva, en contradicción con los estándares internacionales". También reiteró el reclamo permanente de que cese el uso de las dependencias policiales como centros de detención.
Respecto a las condiciones de detención, señaló como puntos de especial preocupación:
* el uso sistemático de tortura y tratos crueles
* la insuficiencia de los anuncios sobre construcción de unidades
* la política de traslados como medida disciplinaria y de control
* las malas condiciones edilicias
* la deficiente atención médica en las cárceles
* la falta de atención médica en las comisarías
* la inadecuada alimentación suministrada
* lo inadecuado de los programas de rehabilitación y educación

Además de esta sensible y sensata agenda, es muy interesante la "receta" que sugiere la Relatoría para, como dice el documento, fortalecer los mecanismos de protección: "es necesario otorgar la independencia y autonomía necesaria a la Defensa Pública Provincial e instaurar el mecanismo establecido en el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes. Asimismo, garantizar la independencia de los miembros del Poder Judicial, a fin de que cumplan de manera efectiva con su función de control de la legalidad de la detención preventiva y de la ejecución de la pena, libres de cualquier tipo de ingerencia o presión".

En el cierre del comunicado, la Relatoría "insta al Estado argentino, en particular a la provincia de Buenos Aires, a diseñar e implementar una política penitenciaria acorde con los principios internacionales que rigen la materia; y a formular un plan general orientado a superar la grave situación que padecen las personas privadas de la libertad y a asegurar el goce efectivo de sus derechos humanos."

lunes, 14 de junio de 2010

Proyecto de Ley Código Procesal Federal

Una vez más (quinto intento desde el Proyecto Maier), volvemos a intentar instalar en el orden federal el proceso penal según Constitución. Pueden acceder con el siguiente link al texto del Proyecto de Ley Código Procesal, expediente 4050-D-2010, firmado por los diputados Albrieu, Rossi y Barrandegui, del FPV, Stolbizer, del GEN, y Vega de la CC, que el día 9 de junio de 2010 ingresó a la Cámara de Diputados.
Este proyecto está basado en el anterior Proyecto INECIP (expte. 2589-D-04, firmado por las diputadas Falbo, Stolbizer y Rodríguez), actualizado y enriquecido con los aportes del Anteproyecto de la comisión del Ministerio de Justicia que coordinó el Dr. Beraldi. En los próximos días comenzaremos a dar una idea de las principales líneas del proyecto.
Bueno, otra vez a discutir reforma federal. Los que estén a favor difundan y defiendan. Los que no estén de acuerdo, opónganse fuertemente y demuestren nuestros errores, que el conocimiento, como dice Foucault que dice Nietszche, es como "una centella que brota del choque entre dos espadas".

Minimalismo penal y eficacia carcelaria

Que la cárcel es un problema, nadie lo duda. Algunos piensan que es un problema mayor que aquél que pretende remediar, y por eso abogan por su abolición.
Yo tengo una curiosa forma de optimismo: pienso que, hasta tanto encontremos algo mejor para hacer, es posible hacerla menos mala (menos violencia inútil, digámoslo de una vez)
La semana pasada el diario Clarín publicó esta nota, que en sí misma me pareció bastante incompleta, casi de baja calidad, aunque cambié de idea con la muy buena subnota que firma el periodista Héctor Gambini.

Hoy no es es el mejor día para que me siente a escribir como el tema se merece. Pero tengo la impresión de que si, al menos, no uso este blog como ayuda-memoria público de los asuntos sobre los que hace falta pensar, me voy a quedar, como de costumbre, con el tema in pectore. Por lo tanto, prefiero recomendar la lectura de la noticia y provocar el pensamiento sobre las cuestiones vinculadas a la cárcel, con un par de párrafos a manera de reflexiones sueltas. Ya volveremos sobre esto en próximos posts, pero al menos arranquemos con dos ideas convergentes desde polos opuestos:
  1. De un lado está el minimalismo penal. Ese principio de mínima intervención penal que nos manda disminuir la violencia social para conseguir la paz, y que por tanto nos obliga a aplicar a la gestión de cada conflicto la solución menos violenta posible, y la cárcel como última ratio. Desde ese aspecto, es indudable que el encierro no debe usarse siempre que pueda sustituirse eficazmente con otra medida, y cuando se use, debe serlo por el menor tiempo que sirva a la finalidad esencial establecida en la Constitución: "la reforma y la re adaptación social de los condenados" (CADH: 5.6). No entro en la vieja discusión (que como bien dijo alguna vez el gran Tute Baigún, no es sobre las teorías sino sobre la mitología de la pena), y no me van a escuchar decir si me parece bien o mal andar por la vida reformando prójimos. Está en la Constitución, y punto.
  2. Y en el otro rincón, la eficacia carcelaria. Aún pensando como el menos humanista de los administradores estatales de violencia, está claro que los recursos estatales jamás son infinitos. La cárcel es un recurso, y tiene un límite. Si no la uso de una forma inteligente y eficaz, no hago bien mi trabajo. Y en estos tiempos de gran demanda de inseguridad, el deber de los agentes públicos de punición es optimizar el aprovechamiento de los recursos: evitar malgastar calabozos encerrando a gente que a lo mejor, podría estar afuera, y hacer lugar para los más peligrosos delincuentes; además, aprovechar al máximo cada condena para tratar de que el penado no reincida (si no me ocupo de eso, sería bastante incompetente, como si me mandaran a llenar la pileta y no me preocupara de ponerle el tapón).
En resumen, tanto desde el garantismo como desde el manodurismo racional (suponiendo que exista), parece que es bastante estúpido no trabajar en el problema de los mecanismos de tratamiento penal y control pos penitenciario.
(Continuará)

Política y Jueces

Hace unos días publiqué un post en el que invito a discutir sobre la vinculación entre el Ministerio Público y la política, sin prejuicios y sin escandalizarnos.
Pero como siempre voy por más, permítanme recomendar para la reflexión o la polémica un artículo publicado en el medio Diario HOY en la noticia, que es un diario de masiva distribución gratuita (además de la edición electrónica) de la ciudad de La Plata, capital de mi provincia.
Seguro que podemos teorizar sobre la independencia de los jueces, escribir libros, artículos y monografías, dar conferencias y clases. Pero -afortunadamente- siempre habrá un periodista para hacernos recordar que allá está el mundo real.
Desde mis treinta y un años de ciudadano -casi todos en ejercicio doloso del cargo-, veintiuno de Abogado y once de fiscal, mi modesta experiencia me dice que lo que allí se cuenta es una pintura hiperrealista (para no decir una foto) de lo que sucede.
Nada de lo que aquí escribo debe considerarse una valoración de la realidad descripta en la nota, sino mero compartimiento de información. Sólo les pido que lean ese artículo, lo que no insume más de cinco minutos.
Después, si quieren seguimos hablando de fábulas y realidades.

NOTA: esto es un repost del publicado hoy con igual título en el blog de la Red de Capacitadores CEJA

jueves, 3 de junio de 2010

Materiales no tradicionales

Afortunadamente, el Centro de Estudios de Justicia de las Américas ha abierto una cuenta en Scribd, un repositorio de documentación académica muy interesante para profundizar la circulación del conocimiento a través de la red.
Sugiero enfáticamente la lectura de todo el material que están subiendo.
Nada en nuestra materia es verdad revelada. Pero la verdad es que leer trabajos comprometidos con la realidad es un descanso para el ánimo, después de años y décadas de leer las hermosas teorías, las inacabables clasificaciones, definiciones y naturalezas jurídicas que enseñamos en la universidad, y que -salvo excepciones- sólo son importantes a la hora de los exámenes de grado y posgrado.
Siempre digo que Argentina tiene una producción de dogmática penal enorme, si la comparamos con la mayoría de los países de la región. Sin embargo, las cárceles argentinas están repletas de pobres sin condena, y en una proporción que está siempre entre las más altas de Latinoamérica. Es decir que tanta dogmática no tiene ninguna influencia en el mundo real.
El documento sobre Desafíos del Ministerio Público es -creo- superador de cualquier manual universitario sobre el tema. El Manual de Defensorías públicas presenta un enfoque totalmente innovador, y aunque -como el otro- podría ser mejorado fuertemente (ambos tienen unos cuantos años), no tiene mucho reemplazo.
El texto de Langer "Revolución en el proceso penal latinoamericano" es una excelente y muy documentada historia de la reforma. Lectura imprescdindible para entender el proceso, si quieren mi opinión, complementa desde la historia "De las Repúblicas Aéreas..." de Binder y Obando, que es la Biblia conceptual de la reforma.
Mientras escribo este comentario, siguen subiendo material, pero valga con lo que acabo de reseñar para interesarlos en asomarse a esta nueva biblioteca, bien distinta de las que solemos frecuentar, y -siempre en mi muy cuestionable opinión personal- mucho más influyente en la realidad.
El consistente trabajo técnico de CEJA no es en sí mismo un objetivo de la reforma, pero sí es un buen respaldo para la acción política transformadora. Y para la nueva reflexión teórica, claro.